El Roto - Viñeta publicada en el País 22/sep/2013 |
Deseamos dar nuestra más sincera enhorabuena a Javier Martínez
Gómez, director general de Intress, por conseguir colar el pasado 25
de octubre un publirreportaje de Intress como un artículo de opinión
en medios regionales (Periódico de Aragón, Heraldo y Aragón
Digital). Nuestras felicitaciones por semejante logro, encima en un
día de gran difusión de prensa como es el domingo. Con esta entrada
no pretendemos quejarnos de la tribuna otorgada por los medios de
comunicación, no en vano nosotros también hemos tenido visibilidad
en todos ellos, por lo que nos parece justo que todas partes gocen de
esta posibilidad. Eso sí, lamentamos que esta oportunidad no se
utilice para debatir sobre el conflicto del COA sino para vender la
trayectoria de una entidad. En esta entrada le damos la consiguiente
replica a dicho artículo, si bien advertimos de que comenzamos a
cansarnos de rebatir frases genéricas y palabras huecas.
Enlace al artículo de Javier Martínez Gómez - Intress, el COA y laatención a la infancia
Tanto los primeros párrafos como los últimos del artículo son
utilizados por el autor para hacer glosa del compromiso y de la
impoluta trayectoria profesional de Intress, como si de alguna forma
el conflicto del COA la menoscabara. Y volvemos a insistirle una vez
más al director general, Educadores en Lucha nunca ha puesto en duda
la labor profesional de los trabajadores de Intress, ni tampoco su
trayectoria. Si acaso, tan sólo en una ocasión, se comentó una
resolución del Tribunal Administrativo de Contratación Pública dela Comunidad de Madrid (TACP) en la que se impidió a Intress hacer
negocio con tres centros para mujeres víctimas de violencia de
género. Sin embargo, no fue Educadores en Lucha los que dictaron
dicho acuerdo, sino que fue el TAPC el órgano que no valoró el Know
How de Intress del que tanto habla usted en su artículo.
Pasamos a replicar frases del texto publicado en los medios
aragoneses:
“En Intress
asumimos la existencia de un conflicto gestado previamente”
Faltaría más, ya dimos clara cuenta de ello en esta entrada del blog, si bien es cierto que a su representante legal en la última
reunión con nosotros no lo tenía tan claro.
“Nuestra actitud
ante el desacuerdo ha sido siempre responder: acudiendo a cuantas
convocatorias de mediación hemos recibido, y proponiendo medidas que
desbloqueen la situación y permitan iniciar la negociación sin
prejuicios”
Esto es lenguaje del país de los unicornios voladores. La realidad
es que su primera reunión con nosotros fue tan sólo un día antes
de desembarcar en el COA y en la segunda, y última reunión hasta la
fecha en el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA),
rompieron el diálogo en el primer minuto al exigir para negociar que
se desconvocara la huelga indefinida que asegura el número de
educadores por turno de atención a los menores. A ¿qué prejuicios
se refiere? Al derecho de huelga. Escriba y adorne como quiera sus
artículos, pero por favor no nos tome por gilipollas, nosotros no lo
hacemos con usted.
“Sabemos y
reconocemos que nuestros equipos profesionales son el gran valor de
la organización”
Tanto como para estar pagando menos y trabajando más horas a mismos
profesionales que desempeñan la misma labor. O tanto como para
buscar el convenio más barato en el que ampararse para reconocerles
su labor profesional.
“Nuestra
prioridad es salvaguardar los intereses de los niños y niñas a
pesar del malestar de los equipos”
Probablemente esta sea la frase más oscura y equívoca de su
artículo. ¿A qué malestar se refiere? Da a entender cosas algo
feas como que con nuestras reivindicaciones no salvaguardamos los
intereses de los niños. Le recordamos que nuestra huelga durante un
año ha permitido mantener el número de educadores por turno, justo
lo que ustedes nos piden que abandonemos para comenzar a negociar.
No venga con pistolicas de agua, y menos con agua muy
sucia, y llena barro.
“En el COA
creemos que el número de educadores que marca la Administración y
el pliego para atender a los niños y niñas es el adecuado
asegurando una buena organización de tareas y de planificación de
la actividad en el servicio”
Traducción en nuestro pueblo: Intress no reconoce que los actuales
servicios mínimos del 100% de la huelga son el número y
organización mínima de educadores por turno para atender a los
menores. Y luego, ya de paso, comienza el siguiente párrafo con una
explicación surrealista de trilero sobre el número de educadores y
menores.
“En estos 20
primeros días de gestión nuestro objetivo ha sido buscar
estrategias consensuadas con los trabajadores del COA, antes de
cambiar o modificar cualquier acción que se estaba llevando a cabo.
Nos ha parecido siempre la manera más razonable de actuar: escuchar,
evaluar, proponer y actuar”
Sobre sus 20 primeros días de gestión no nos extendemos que ya le
dedicamos dos notas de prensa (1 y 2). Pero sobre su “manera más
razonable de actuar”, le recordamos que no nos escucharon cuando se
les advirtió de donde se metían, evaluaron una posibilidad
estratégica de entrar en Aragón a través de un procedimiento
negociado sin publicidad acelerado por un gobierno en funciones,
entendemos que para ello propusieron un proyecto educativo que hasta
la fecha desconocemos y han actuado excusándose en su
desconocimiento del recurso o en las zancadillas de la anterior
entidad adjudicataria, FAIM, pese a que sin pudor alguno hayan
utilizado muchos de sus documentos tipo tan sólo cambiándoles el
logo.
“Nuestro trabajo
es vocacional. No hay reparto de beneficios, ni ánimo de lucro, pero
sí un objetivo de atender a las personas en riesgo”
Tan vocacional que su representante legal en nuestra primera reunión
no tuvo problema en reconocer en que habían calculado en este
concurso una pérdida de 100.000€ simplemente para conseguir
introducirse en el mercado de la Intervención Social de Aragón. Su
compañera no mejoró la respuesta cuando le preguntamos de donde
sacaban ese dinero. La representante de Intress manifestó que
también ofertaban servicios privados y podían reinvertir ese dinero
en otros recursos. Ya le explicamos a esta misma persona de forma
sencilla y clara que la administración pública no debe sacar
recursos de menores en protección con presupuestos deficitarios y
que Intress haría mejor en invertir el dinero pagado por sus
usuarios en mejorar más si cabe el excelente trabajo que harán con
dichos clientes.
De verdad, señor Martínez Gómez, nos encanta dialogar, debatir y
que todos disfrutemos de las mismas tribunas de difusión. Puede que
no nos crea, pero insistimos en que nosotros no ponemos en duda la
trayectoria de Intress por mucho que usted se empeñe en enarbolarla,
nos centramos en el conflicto del COA. Y a nuestras preguntas
necesitamos respuestas y argumentos, no publirreportajes. No somos
clientes suyos, sino sus asalariados.
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