Traid, de chaqueta azul, junto a Broto y Santos. Fuente: Aragón_hoy |
En
el juego que se llevan a dos bandas el Gobierno de Aragón e Intress
con los menores en protección y reforma, la semana pasada se hizo
público el nombre del señor X: Eduardo Traid García, director
provincial del Instituto Aragonés de Servicios Sociales. En esta
información
se expone su protagonismo. Por cierto, una noticia que demuestra una
vez más que el conflicto social y político del COA no se
circunscribe a un conflicto laboral como insiste falazmente la
consejera Broto para evitar su responsabilidad política.
La
información
deja muy claro cómo Intress campa a sus anchas en el COA con la total
complacencia de la consejera Broto y el perjuicio que conlleva para
menores y educadores. Intress lleva un año sin implantar un proyecto
educativo en el COA, y en lugar de exigir responsabilidades, Marivi
Broto da pábulo a la versión de la entidad privada catalana y culpa
a los educadores de no querer conocerlo. La mentira de ambos bandos
(Gobierno y entidad privada) se desmonta fácil, ya que los
representantes de lo trabajadores llevan todo el año pidiendo el
proyecto a Intress y reuniéndose con ella siempre que se le ha
llamado. Pero en lugar de entregar proyecto educativo, Intress lleva
amenazándonos desde mayo con implantar una nueva organización de
trabajo en el COA, que a nuestro juicio perjudica aún más la
atención a los menores y cuyo único objetivo es represaliar a los
educadores veteranos y caros para que abandonen de una vez por todas
su puesto de trabajo.
Evidentemente
no somos tontos e Intress no puede implantar esta organización de
trabajo por su cara bonita, debe contar con el visto bueno y permiso
del director del centro. Así que en nuestra última reunión con
Intress, que volvió a romper por enésima vez las negociaciones,
preguntamos por ello, y cual fue nuestra sorpresa cuando nos
contestaron: “Sí, tienen conocimiento el director y Eduardo
Traid”. Sin embargo, como reconocen fuentes del Gobierno de
Aragón a diario.es
Intress no ha comunicado oficialmente ninguna propuesta de cambio de
organización de trabajo al IASS. Traducimos el vergonzante juego de
esta entidad privada: Intress llora a IASS que no puede implantar un
proyecto educativo porque los malvados educadores no quieren
escucharles, sin embargo no tienen ningún problema en trasladarnos y
amedrentarnos con un cambio de organización de trabajo que ni ha
sido remitido oficialmente al IASS. Estas premisas y los lenguaraces
representantes de Intress dejaron con el culo al aire a Eduardo
Traid, a quien citaron cual primo de Zumosol. En esta encrucijada
solo hay dos opciones:
- Eduardo
Traid, director provincial del IASS, ha dado permiso extraoficial a
Intress para que utilice una propuesta de organización del trabajo
en el COA que el Gobierno de Aragón desconoce.
- Intress miente y utiliza al director provincial del IASS para amedrentar a los educadores en las negociaciones.
Ambas
opciones son de una gravedad extrema, y cuya responsabilidad recae en
Intress o en el IASS. Señora Broto, vale de culparnos a nosotros, y
si no quiere que el conflicto social y político del COA le arrastre en esta
riada de excrementos, aclare este entuerto y depure
responsabilidades, tanto si corresponden al director provincial del
IASS como a la entidad privada. A nuestro juicio, el silencio de
Eduardo Traid solo lo podemos entender como una complicidad con la
entidad privada y una deslealtad al Gobierno de Aragón, que no tiene
conocimiento oficial de los movimientos de Intress. Están jugando
con fuego, pero los que se queman son niños y educadores. Nosotros
tenemos muy claro que estos nervios de Intress se deben a que
actualmente están en juego doce millones de euros, precio de
licitación del Centro de Reforma de Juslibol. Y consejera Broto le
recordamos que Intress reconoció que aceptaba gestionar el COA
con pérdidas económicas para abrir mercado en lo social de Aragón.
Si quieren pueden darles ahora ese gusto con 12 millones de euros.
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